La AICP convierte a las personas dependientes en las protagonistas de una intervención global

Hemos entrevistado a Belén Maldonado, diplomada en Terapia Ocupacional, especialista en Atención Integral y Centrada en la Persona y profesora de nuestros cursos de “Modelo de Atención Integral y Centrada en la Persona (AICP) para personal sociosanitario” y “Modelo de Atención Integral y Centrada en la Persona para Terapeutas Ocupacionales”, sobre este nuevo paradigma en la atención a personas dependientes.

Maldonado ha subrayado cómo el modelo de AICP se basa en una intervención desde una perspectiva global, que involucre a todo el Centro de atención.

¿En qué consiste el Modelo de AICP?

El modelo de Atención Integral y centrado es una nueva forma de entender los cuidados de los adultos mayores, personas dependientes y personas con discapacidad. La atención centrada se define individualizando la atención, teniendo en cuenta la opinión y las preferencias de la persona, para mejorar su calidad de vida y respetando su dignidad. Además, incluye la atención integral, que supone una coordinación entre servicios de salud y sociales, para atender como un solo servicio.

¿Qué lo distingue de otros modelos de atención?

A través del modelo de AICP no solo se lleva a cabo una atención individualizada adaptándose a las características físicas, emocionales o cognitivas de los pacientes, sino que se tiene en cuenta la opinión, los gustos y las preferencias de la persona. Esto se hace adaptando la institución a la persona, no la persona a la institución.

¿A quién va dirigido este tipo de atención? Este curso va dirigido a todos los trabajadores sociosanitarios, de la salud o de profesiones sociales, que quieran aplicar un nuevo modelo inspirado en los modelos que se emplean en la mayor parte de Europa, principalmente en los países nórdicos, que han sido pioneros de la atención a personas.

¿Cómo se lleva a la práctica?

El modelo tiene diferentes ejes:

  • El profesional de referencia, es decir, la persona que tiene toda la información sobre el paciente, desde sus gustos y preferencias, hasta sus enfermedades y cómo llevar a cabo sus cuidados. Este profesional es el encargado de explicar a sus compañeros todo lo que incumbe al paciente del cual es referente. Normalmente es un auxiliar, pero también puede ser un técnico, aunque las funciones de estos últimos son más de enseñar y/o asesorar al personal auxiliar o de geriatría sobre cómo deben realizar su trabajo.
  • Adaptación de los entornos para que sean seguros, accesibles y hogareños.
  • Poner a la persona como centro de la atención, mediante la historia de vida y el plan de atención y vida. La historia de vida es la biografía de la persona más sus gustos y preferencias. Se elabora con el paciente y su familia, para que sea una narrativa en primera persona, que nos sirva para deducir cómo debe ser la intervención con esa persona. Basándose en esta información, se elabora un Plan de atención y vida, que será un documento personalizado que reflejará cómo deben ser los cuidados y las actividades de esa persona, y como será su día a día en una residencia.

¿Por qué se hace necesario emplear este sistema?

Porque al igual que la sociedad, la atención a las personas con dependencia va cambiando.

Fenómenos como el incremento progresivo de la esperanza de vida, la incorporación masiva de la mujer a la vida sociolaboral, la globalización, la revolución tecnológica, los avances en materia de igualdad y la conquista de nuevos derechos civiles y sociales están entre los factores que nos abocan a la necesidad de redefinir, por obsoletas, algunas de nuestras políticas sociales. En concreto, los modelos clásicos de apoyo a la inclusión social y de atención a personas mayores y personas con discapacidad, especialmente cuando se encuentran en situaciones de fragilidad o de dependencia.

¿En qué lugares sería deseable implantarlo?

En instituciones de personas mayores, personas dependientes y personas con discapacidad. Pero también es compatible con los servicios de atención a domicilio.

¿Qué profesionales pueden aplicar el modelo de AICP?

El modelo es un nuevo paradigma, por lo tanto, se debe ver como una visión de Centro. Las personas que deben liderar el cambio hacia el modelo son los técnicos que trabajan en los Centros de atención: trabajadores sociales, educadores sociales, terapeutas ocupacionales, enfermeras, etc., siempre con el apoyo de la Dirección.